“Turismo Barrial Inteligente”-TBI- es el proyecto de la Escuela de Administración Pública de la U. Mayor que se adjudicó un Fondo de Innovación para la Competitividad del gobierno de la región metropolitana, que busca revitalizar barrios con gran patrimonio cultural por medio del desarrollo de plataformas informáticas y su aplicación en tecnología móvil.
El mercado del turismo en Chile mueve unos 6,7 billones de dólares por año y emplea a 210 mil personas. Casi dos millones de extranjeros visitan Santiago actualmente, que cada día se transforma en ciudad más cosmopolita. Sin embargo, las plataformas de información turística no han alcanzado a actualizarse al ritmo vertiginoso en que cambia la ciudad y la mayoría se concentra en hitos que no rescatan toda la riqueza cultural ni patrimonial de la capital.
Barrios como Franklin, donde está ubicado el tradicional Persa Bío Bío, o la calle Victoria, que reúne al gremio de zapateros y artesanos del cuero nacional, son dueños de un patrimonio histórico y cultural que es parte fundamental de la identidad barrial de Santiago y que hasta el momento no han sido introducida en las redes tradicionales de turismo.
Estos datos fueron observados por investigadores de la Escuela de Administración Pública de la U. Mayor y llevados a inédito estudio al respecto, que les valió la adjudicación de un Fondo de Innovación para la Competitividad del gobierno de la región metropolitana que asciende a 195 millones de pesos. “La penetración y captura del mercado están estrechamente relacionados con la pertenencia y la calidad de la información. A nivel turístico, el país y la ciudad se encuentran rezagados en ese ámbito”, explican.
La razón por la que nuestra Escuela Administración Pública, participa de un fondo concursable con aportes para la innovación, es desarrollar un proyecto que permitirá la transferencia de conocimientos a las pymes beneficiarias, favoreciendo un proceso de innovación en el sector productivo de los barrios patrimoniales identificados en el proyecto, con el objetivo de mejorar la oferta de productos turísticos patrimoniales existentes en la región Metropolitana. Según explica Henry Crisóstomo, director del proyecto y Director Docente de la Escuela: “La Universidad Mayor tiene por misión contribuir al progreso de la nación y al beneficio de las personas. Ese eje nos invita a todas las disciplinas a encontrar espacios de colaboración con el entorno para ejecutar nuestra misión institucional y, a la vez, nutrir a nuestros estudiantes y académicos del valor que tiene innovar, no tan sólo desde la construcción del conocimiento entre expertos, sino con y para las personas y en especial para contribuir desde estas instancias con nuevas miradas a las políticas públicas del país”
Complementarios a los fines de desarrollo, vinculación con el medio y posicionamiento de la Escuela — con algo menos de 3 años de existencia a la fecha—, el proyecto beneficiará a los actuales y futuros estudiantes de Administración Pública, al integrarlos en algunas fases de implementación y evaluación que el proyecto contempla, contribuyendo a que pongan en práctica sus conocimientos y desarrollen habilidades que son hoy altamente valoradas por los empleadores del sector público: acercamientos respetuosos y participativos con los entornos comunitarios.
Tecnología y turismo
El proyecto plantea tomar como herramienta la tecnología y la gran penetración de smartphones y redes móviles que hay en Santiago —un 65% de los chilenos tiene acceso a internet y es la herramienta más usada al momento de buscar información turística—, para desarrollar una aplicación que será un puente entre las pymes y la TIC´s. Para esto, se desarrollará una metodología que fortalezca las capacidades técnicas y organizacionales de los conjuntos de microempresas barriales para crear nuevos circuitos turísticos, cuya información estará disponible para todos los turistas en la App, junto a guías impresas y mapas desplegables con las rutas barriales.
El proyecto será ejecutado por un equipo multidisciplinario de profesionales —antropólogos, administradores públicos, geógrafos, ingenieros y periodistas, entre otros—, quienes se integraran al equipo de la Escuela de Administración Pública para ejecutar el propósito con el rigor y excelencia comprometidos. Sin duda se trata de una oportunidad para robustecer el proyecto académico de la Escuela de Administración Pública y su objetivo de convertirse en un referente universitario en materia de innovación y aportes en políticas públicas.
Apoyo estratégico
Un aliado estratégico en la adjudicación de este FIC fue la Dirección de Investigación e Innovación de la U. Mayor (DIIP), organismo que se encarga de entregar apoyo técnico y operativo a las iniciativas de las distintas unidades académicas de la Institución, con el objetivo de robustecer las líneas de investigación y desarrollo de proyectos de emprendimiento. “Este es un proyecto de vinculación con el medio que significa un gran logro para la Escuela de Administración Pública, sobre todo porque es la primera vez que postulan y fueron seleccionados entre más de setenta propuestas”, explica Víctor Hugo Espinosa, Coordinador de Control y Gestión de Proyectos de la DIIP. Este es el tercer Fondo de Innovación para la Competitividad que se adjudica la Universidad Mayor y el primero en la línea de investigación social.